Li y Lai Xi son dos soldados que están al servicio del emperador chino. En su trayectoria como servidores milicianos, estos dos soldados han cosechado muchos triunfos y se han forjado una sólida reputación como luchadores con espada. Son leales y están dispuestos a ofrecer sus servicios mientras sean requeridos, pero Lai Xi piensa que ya es hora de volver a casa y vivir alejado de los conflictos bélicos. Sin embargo, su sueño aún ha de esperar porque será enviado a una última misión que, probablemente, sea la más difícil de todas. Tendrá que acabar con el teniente Li por haber desobedecido tiempo atrás la orden de matar a unos niños y mujeres. La lucha entre ambos está garantizada pero antes tendrán que combatir juntos una vez más para salvar a un monje budista.